Las cámaras termográficas, especialmente las no refrigeradas, son fabricadas actualmente a muy bajo costo, por lo que su uso y adquisición están cada día más generalizados. También se ha reducido considerablemente su tamaño para poder utilizarlas en las armas personales modernas (miras térmicas).
El traje de francotirador ligero ha sido desarrollado especialmente para francotiradores y tropas de reconocimiento. Tiene una muy alta eficiencia en términos de reducción de la firma visual y térmica. El diseño individual y la coincidencia de color seleccionado apoyan al soldado permitiéndole confundirse perfectamente con el entorno y ser, al mismo tiempo, lo más móvil posible.